Esto ocurre un
día a una hora cualquiera, en la cama tumbada escuchando una de tus canciones favoritas.Y es
cuando retrocedes en el tiempo y te empiezas a dar cuenta que has crecido tanto
por fuera como por dentro..Y es entonces, cuando te miras en el espejo y ves
a una persona a la que no sabrías cómo definir, una mezcla entre alocada y
sensible, algo especial hay en ella que ha cambiado mucho. Por eso, es que
no la puedes reconocer..Ésa a la que nunca has querido del todo, aquélla a
la que siempre le has puesto algún reproche, ésa que no querías ver ni
reconocer porque te daba miedo el cambio, te daba miedo ver y
enfrentarte cara a cara con las personas, con tu día a día..Te daba miedo
el que la gente y tú misma te vieras tan "rara"..Pero esque eso no es
lo peor, lo peor esque ni tú misma querías darte la oportunidad de seguir
viviendo, de seguir luchando por
algo que no sabías muy bien lo que era, pero que te hacía mantenerte en el
suelo, con los pies firmes..FUERTE.
Esa chica no
sabía exactamente qué era, pero había algo, algo tan profundamente intenso,
que la hacía permanecer FUERTE, y si le temblaban las piernas o se le aceleraba
el pulso, no pasaba nada porque se acostaba y pensaba que el día de mañana
sería mejor..Aunque siguiera igual, aunque no pudiera comerse el mundo
ese día, aunque ese día se lo pasara llorando en la cama sin poder moverse
de ahí, aunque no encontrara remedio ni solución, aunque se quedara viendo
el mundo a través del cristal..A ella le daba igual.¿Sabes por qué?
Porque ella
sabía que un día se lo comería, se comería el muundo entero..! Y que cuando
llegara ese día, ella se habría hecho FUERTE, tan FUERTE que nadie ni nada
la detuviera en su camino....!